Seguro que has escuchado hablar de la inteligencia emocional y, seguro que, aunque no lo sepas, la has utilizado muchas veces en tu vida. Hoy te vamos a contar los beneficios que puede tener para ti aplicar la inteligencia emocional en el estudio de tus oposiciones.

 

Concepto de inteligencia emocional

Aunque viene de lejos, el término “inteligencia emocional” lo popularizó Daniel Goleman a partir de 1995 con su libro “Inteligencia emocional”. 

En 1920 Thorndike habla de inteligencia social y de la importancia de la motivación y el entendimiento hacia otras personas.

Howard Gardner a principios de los años 80 amplía el concepto al hablar de inteligencias múltiples. Estas se miden no solo por el cociente intelectual, sino por otra serie de factores como la empatía y la autocomprensión.

 

Entonces, ¿a qué hace referencia la inteligencia emocional?

Aunque pensemos que todas las decisiones que tomamos son analíticas, estamos equivocados. La mayoría de las decisiones van a estar determinadas por las emociones.

Por lo tanto, la capacidad para reconocer, comprender y gestionar nuestras emociones y las de los demás es a lo que denominamos “inteligencia emocional”.

Poder comprender lo que ocurre tanto dentro como fuera de nosotros hará que manejemos mejor nuestras emociones en las diversas situaciones que se nos van planteando.

Cuando aprendemos a gestionar nuestras emociones de modo que no nos abrumen situaciones adversas, desconocidas o inquietantes para nosotros, estaremos utilizando los recursos que nos ofrece la inteligencia emocional.

 

Aplica la inteligencia emocional en el estudio de oposiciones

 

Si eres un estudiante de oposiciones, ten en cuenta que vas a sentir muy diversas emociones a lo largo de todo el tiempo que dure el estudio de tu oposición.

Estas emociones pueden ser tanto positivas como negativas.

Al aprender a manejarlas con ayuda de la inteligencia emocional, puedes alcanzar resultados más eficaces y tu vida, en general, mejorará.

Veamos algunos factores que más van a repercutir en tu vida de opositor.

 

Autoconocimiento y autoestima

Hacer un ejercicio de autoconocimiento, explotando cuáles son tus puntos débiles y tus puntos fuertes, será muy importante para ti.

Al conocerte realmente, depositarás una mayor confianza en ti mismo, lo que hará que tu autoestima mejore, lo que hará que avances y seas capaz de tomar decisiones.

Todo esto va hacer que mejore también tu desarrollo personal.

 

 

Productividad

La inteligencia emocional está intrínsecamente unida a la productividad, ya que repercute en la confianza, la iniciativa y el control emocional.    

Además te puede ayudar a manejar con resolución situaciones complejas.

Como ves, lo que haces es tomar decisiones, y al tomarlas, avanzas y si avanzas eres productivo.

https://www.youtube.com/watch?v=oiY7Odjupqc

 

Motivación

La aplicación de la inteligencia emocional produce una cadena: al conocerte aumenta tu autoestima. Esta repercute en una mayor productividad y, como estás viendo que todo va sobre ruedas, estarás altamente motivado.

Es muy lógico que alguna vez hayas pensado en mandar lejos la oposición y dedicarte a otra cosa.

Pero si sabes manejar y superar el sentimiento de frustración, por ejemplo, tendrás siempre en mente tu meta y seguirás adelante para conseguir tu objetivo.

 

Fuera estrés

La inteligencia emocional previene el estrés y, en el caso de que lo padezcas, te ayuda a controlarlo.

Durante la oposición vas a vivir momentos que pueden provocarte mucho estrés y no digamos cuando se acercan los exámenes. 

Puede aparecer el denominado síndrome del opositor

Si sabes gestionar bien tus emociones, y aplicas la inteligencia emocional en tu día a día, prevendrás el estrés y las consecuencias más relevantes es que aumentarán tanto tu concentración como tu productividad.

 

Ayuda a relacionarte con los demás

La vida de un opositor cambia.  Puedes llegar a no salir de tu cueva o a vivir en un estado permanentemente alterado en el que las relaciones tanto con las personas de tu familia como con las de tu círculo más próximo pueden llegar a hacerse muy difíciles.

Esto es normal porque cuando más confianza hay, menos miramientos vas a tener un día que estás muy estresado y tus hijos, por ejemplo no paran de dar gritos y jugar.

Pero si echas mano de la inteligencia emocional, estas relaciones interpersonales van a mejorar considerablemente y te van a ayudar a no provocar conflictos o a mejorarlos.

 

Potencia tu bienestar psicológico

La inteligencia emocional es muy beneficiosas para el bienestar psicológico de las personas, ya que va a ayudarte a gestionar tus emociones.

Cuando aprendes a gestionar correctamente las emociones tu estabilidad psicológica será mucho mayor, y esto es muy importante para estudiar.

En muchos colegios se está enseñando ya inteligencia emocional a los más pequeños, obteniéndose resultados positivos muy significativos en sus estudios y en la relación con sus compañeros, profesores y familiares.

 

Adiós a la ansiedad y la depresión

Cuando no se gestionan bien las emociones, muchas personas pueden llegar a padecer ansiedad y depresión.

Aplicando la inteligencia emocional se previenen la aparición de ambas y, en el caso de que padecieras algún síntoma, se puede aliviar considerablemente.

La inteligencia emocional en estos casos te va a ayudar a hacer una introspección para identificar tus sentimientos, esto te va a llevar a observar con nitidez tus emociones, así podrás cambiar los sentimientos ante la misma situación.

Y todo ello te conducirá a reducir enormemente tus niveles de ansiedad.

 

El bienestar será tu estado

Cuando las emociones no nos desbordan, nuestra salud física es mucho mejor.

Si tienes problemas de ansiedad o de depresión puede influir notablemente en tus hábitos alimenticios.

También pueden provocar alteraciones en el sueño y todo ello producirá un desgaste y un malestar físico y emocional diario.

La capacidad de concentración desaparecerá y acabarás tirando por la borda todo lo que has estudiado.

Esta es la causa por la que la inteligencia emocional puede cambiar tu estado habitual.

Y ya sabes que, para todo en la vida, y más para estudiar oposiciones, cambiar el estrés por el bienestar puede obrar milagros.