Planificar el tiempo de estudio

 

Sabemos que no es lo mismo preparar unas oposiciones si estás trabajando o si no lo estás haciendo.

En el primer caso va suponer  un mayor esfuerzo, por eso hay que planificar mucho el tiempo de estudio, sin olvidar nunca el tiempo de descanso.

Tanto si trabajas como si no, antes de ponerte a estudiar una oposición debes tener en cuenta varios factores que van a resultar importantes a la hora de planificar tus estudios. 

¿Está establecida ya  la fecha de examen?

Si es así sabes exactamente el tiempo que tienes  por delante. Si no, habrás de hacer una estimación aproximada y, en ambos casos, nunca te olvides de dejar al menos un mes para el repaso de toda la materia.

También deberás saber cuántas páginas tiene tu temario, de este modo sabrás las páginas que debes estudiar por semana, calculando antes el tiempo que tardas en estudiar un tema o un número determinado de páginas.

Recuerda que no consiste simplemente leerlas, sino que consiste en leer, comprender y memorizar.

Para ello debes hacer la prueba con un tema ( o unas páginas) que te resulte más fácil y otro que te resulte más difícil.

Lo mismo ocurre si tus oposiciones cuentan con pruebas prácticas o pruebas físicas: debes hacer una media  de cuánto tiempo  te  lleva superar estas.

No olvides hacer una media entre las pruebas más fáciles y las más complejas.

A todo lo anterior, no olvides añadir un porcentaje de horas extras, ya que siempre hay imprevistos.

Otro factor a tener en cuenta es si vas a prepararte en una academia o tú solo.

Te recomendamos que, siempre que te lo puedas permitir,  te prepares en una academia (sobre todo si los exámenes constan de pruebas orales o prácticas que sean complejas).

Así te obligarás más a estudiar y solventarán tus dudas y no tendrás pensamientos de dejarlo cuando te fallen las fuerzas para seguir con el estudio.

Si no vas a estudiar en una academia, lo más importante que deberás hacer es organizarte y planificar siempre de un modo realista.

 

                                                                               

 

 

 

Objetivos

Una vez  estimado todo el tiempo global que debéis invertir en preparar tu oposición, lo siguiente es marcar objetivos diarios, semanales y mensuales.

Si trabajas, y dependiendo del horario, deberás contar con todos los huecos que tengas libres para estudiar

Puedes estudiar en el transporte, entre la comida y la entrada al trabajo, después de la cena, los fines de semana…

Pero tampoco te olvides de descansar, ya que si no te va sobrepasar todo y vas a querer tirar la toalla muy pronto.

Con todo esto podrás ir marcándote objetivos diarios, semanales y mensuales.

Como ves, no es fácil, pero tampoco imposible.

Preparar una oposición es una carrera de fondo, lo importante es no posponer el estudio, crear un hábito diario y no dejar todo para el último mes.

 

¡Ánimo y a por tu plaza!