Cuando acabas de comer es muy normal que sientas una sensación de modorra que puede hacer que baje tu concentración y que te haga sentir que te falta toda la energía a media tarde.

Son esos momentos en los que matarías por una siesta.

Si tienes opción de echar una cabezada durante un cuarto de hora o veinte minutos, estupendo.

Recuerda que ya hablamos de los beneficios que puede aportar a tu memoria que dediques un rato a la siesta.

Pero si no puedes porque o no estás en el lugar adecuado o tienes que aprovechar estos momentos para estudiar, en este post te vamos a dar algunos consejos para que puedas evitar esos bajones de energía que acaban con tu concentración.

 

¿Por qué se produce esta bajada de energía?

 

 

Aunque no todos nos regimos por los mismos horarios, es cierto que a media tarde ya llevas despierto entre seis y ocho horas, por lo que puede aparecer el cansancio y, también el sueño.

Además, si acabas de comer esta sensación será más intensa.

Recuerda que es muy importante para que esto ocurra con menos intensidad el dormir durante la noche las horas suficientes.

 

La explicación que dan los especialistas a estas bajadas de energía después de comer es que, al hacer la digestión, suele bajar la tensión.

Y esto se produce porque se necesita mucha sangre en la zona digestiva, por lo que la sangre del cerebro y del corazón destinan parte para ir a ayudar a la zona digestiva.

 

 

Consejos para evitar la falta de energía a media tarde

 

Haz comidas más ligeras y frecuentes

Para que tampoco te den bajadas de azúcar y esto te haga atiborrarte en las comidas, come (sanamente) cada 2 o 3 horas, pero quédate con hambre, sobre todo en la comida.

Hay un porcentaje que es el que utilizan los habitantes de Okinawa (los más longevos y sanos del mundo) en todas sus comidas y es que no te llenes al 100%, deja un 20%, quédate con un poco de hambre.

Esto hará que no tengas tanta sensación de saciedad y que tus digestiones sean más ligeras.

 

Camina unos minutos

 

 

 

Cuando estés estudiando y comiences a sentir los primeros síntomas de falta de energía o de sueño, levántate de la silla y camina.

Si puedes, sal a caminar a la calle, con unos diez minutos bastarán. Si no te apetece, anda aunque sea por la casa y realiza algunos estiramientos.

Te recomendamos que salgas a la calle, te dará la luz solar, el aire, te oxigenas y acabarás rindiendo más que si caminas dentro de casa.

Puedes verlo en este estudio.

 

Haz ejercicios visuales

Descansar la vista es muy importante, ya te hablamos de los beneficios y de la prevención de otros problemas que puede causarte el no cuidar la vista cuando estudias oposiciones este post

Si crees que al cerrar los ojos para descansar la vista te vas a quedar dormido, realiza ejercicios visuales (en el post citado tienes un vídeo con alguno de ellos) que van a hacer que no te duermas.

 

Hidrátate por dentro y por fuera

Bebe agua, o té verde, pero procura no tomar café después de comer, ya que este es preferible tomarlo cuando te levantas.

Al tomar café después de comer se aumenta la vasoconstricción, por lo que es mejor la alternativa del té verde.

Ten en cuenta que con un 1% de deshidratación ya empieza a producir cansancio y a disminuir la concentración.

Por este motivo es importante que estudies siempre teniendo cerca un vaso o una botella de agua.

No eches mano de los refrescos azucarados porque te podrían provocar bajadas de azúcar.

No olvides levantarte y mojarte la cara con agua fría.

En verano puedes recurrir a duchas muy rápidas con el agua tirando a fría.

 

Escucha un par de canciones

Procura no poner canciones que sean muy tranquilas.

Recurre a canciones que conozcas y que te hagan bailar o suban tus niveles de energía.

 

Ríete

 

 

 

También puedes recurrir a ver un vídeo que te haga reír.

Al reírte oxigenas el cerebro, aumenta tu presión arterial y tu ritmo cardiaco y, además, segregas dopamina.

 

Cambia de tarea

Muchas veces si estamos durante este tiempo de bajón realizando tareas que no son gratas o que son monótonas, puede que te entre más bajada de energía.

Si estás intentando memorizar un tema y no hay manera, cambia la tarea y ponte, por ejemplo, a dibujar un mapa mental.

De este modo adelantarás trabajo y, además, acabarás despertándote.

 

Seguro que se te ocurren más cosas que puedes hacer durante unos minutos para capear la bajada de energía de media tarde.