No nos engañemos, estudiar  una oposición requiere de memorizar gran parte del temario. Pero tranquilo, hoy te traemos algunas técnicas para memorizar rápidamente y poder seleccionar la información que realmente es necesaria.

Todo el día estamos sometidos a estímulos que aportan información, sobre todo a nivel inconsciente.

La mayoría de la información no es relevante, aunque en ocasiones es útil retenerla y memorizarla.

Esta cantidad de información tiene que procesarla nuestro cerebro y debe desechar la realmente importante, sobre todo en lo relativo a nuestra supervivencia.

 

Memorización de temario

Si quieres memorizar, normalmente no vale con escuchar o leer esta información una sola vez.

Hay veces que la información sí se puede quedar en nuestra memoria, ya sea porque haya causado un gran efecto en nosotros, o bien porque nos la han contado de manera que no se nos olvide.

Sin embargo, esto no ocurre en la mayoría de los casos, por lo que tenemos que poner todos los sentidos y la concentración en la memorización.

Pero este proceso debe ser rápido, y más cuando se trata de una oposición,  ya que no podemos eternizarnos en memorizar un tema, hay muchos por delante.

 

Técnicas eficaces para memorizar rápidamente

 

Lectura

Primeramente es aconsejable que leas todo lo que pretendes memorizar como lo harías de forma habitual.

Después haz una segunda lectura, pero esta vez leyendo en voz alta.

El por qué resulta eficaz es que cuando leemos en voz alta trabajan tanto la vista como el oído, por lo que, además de estar más atento, tienes dos canales por los que estás recibiendo esa información.

 

Repaso

Como dijimos anteriormente, es difícil retener toda la información con una sola vez que haya impactado en el cerebro.  

Por este motivo, repasar y repetir afianzan la información en la memoria llegando, incluso, a ser algo automático.

 

Expón el tema a otra persona

 

Ten a alguien próximo, que sea paciente contigo, y exponle el tema de memoria.

 

Va a resultar muy útil, además de para memorizar, ya que estás explicando el tema con tus palabras, por si se da el caso de que tengas que hacer una exposición oral de algún tema.

Si desde que comiences a estudiar te habitúas a hacer estas exposiciones, te enfrentarás a ese tipo de examen sin problema.

 

Además de ayudarte a memorizar el tema, la otra persona te podrá dar indicaciones sobre si utilizas muchas muletillas o sobre tu expresión corporal.

 

Esquemas, resúmenes, mapas mentales y flash cards

 

Al realizarlos, primeramente vas a repasar el contenido. Al ser esquemáticos, vas a poder fijar la información rápidamente, además de hacerla entendible para ti.

Igualmente, te van a resultar de muchísima utilidad a la hora de repasar con rapidez los temas y los conceptos.

Es más, otro de los fuertes importantes de todos estos modos de repaso es que, al tenerlos en diferentes formatos, puedes memorizarlos de mejor manera.

No te decimos que hagas todos estos formatos en todos los temas, porque puede provocar el efecto contrario, te puedes dispersar.

 

Pero sí debes probar para saber cuál es el método que mejor se adapta a ti y a tu forma de memorizar y de centrarte en el contenido.

Técnicas para memorizar rápidamente

Utiliza métodos nemotécnicos

 

Puedes crear historias, metáforas, siglas, acrónimos o cualquier cosa que se te ocurra que pueda llevarte a retener mejor la información.

Es útil con fechas, con leyes, artículos, etc.

 

Relaciona lo ya aprendido con tu nuevo aprendizaje

Es lógico que te presentes a oposiciones que tengan relación con lo que has estudiado o trabajado anteriormente porque esto lo hará más fácil. Y también es cierto que muchas veces no se da este caso.

Pero si eres de los que te presentas a una oposición de la que ya algo te suena por tus estudios, o por tus trabajos anteriores, es más fácil que relaciones la información nueva con lo ya aprendido,

Esto te llevará da dotar a esta nueva información de un mayor sentido y será más fácil que memorices de manera más rápida y eficaz.  

Si, además, lo que estás estudiando te genera interés y no te aburres, el aprendizaje es mayor y satisfactorio, ya que lo vinculas con sentimientos positivos.

Por esto es muy importante para llevar a buen término una oposición que, primeramente te informes bien sobre ella y el temario y veas si va a suponer para ti un camino arduo o un camino llevadero.

 

Estudia en un lugar confortable

Ya hemos hablado en otras ocasiones sobre este asunto.

Si estudias en un lugar confortable, con la iluminación apropiada, con una temperatura adecuada, con una silla y con una postura corporal que no te provoque dolores de espalda, etc., estarás favoreciendo a que el aprendizaje se haga más deprisa.

Esto es porque no estarás preocupando de si hace frío, o si te duele la espalda.

Incluye también  dejar a parte los elementos que te puedan distraer de tu objetivo: móviles, televisión, navegar por Internet, etc.

 

 

Descansa y come bien

El descanso siempre es importante y también hemos hablado sobre ello en múltiples ocasiones.

Por más cómodo que se tu lugar de estudio, si te tiras sentado ocho horas en la misma postura, dará lo mismo que tu silla sea la más cómoda del mundo, porque te dolerá la espalda, o la cabeza.

Haz descansos puntuales y levántate de la silla, relajarás tu vista.

Realiza estiramientos  de cuellos, brazos y piernas.

Anda un poco, muévete aunque sea cinco minutos.

Corta el estudio a la misma hora siempre, y procura que no sea muy tarde. Esto te ayudará a descansar mejor por la noche, que es cuando tu cerebro trabaja para fijar en la memoria lo aprendido durante el día.

Respecto a la alimentación, llevar una alimentación sana y equilibrada, que aporte los nutrientes y vitaminas necesarios para que  el cerebro y el cuerpo funcionen adecuadamente, será otro de los factores que ayudará a la memorización.