Prevenir el bloqueo mental es fundamental a la hora de emprender el largo camino del estudio de las oposiciones.
No es extraño que tengas temporadas que puedas sentir que no puedes con ellas.
Te has bloqueado y no puedes seguir avanzando, por mucho que todo el mundo alrededor te apoye.
Opositar desgasta mucho, requiere mucha fuerza de voluntad y una gran paciencia.
El bloqueo mental puede tener muchos orígenes: estrés, desgaste emocional, la rutina, el agotamiento físico, preocupaciones personales, cuestiones laborales…
El mero hecho de solo estar estudiando las oposiciones, en la que se incorporan conocimientos nuevos y se está sometido a mucha presión durante mucho tiempo, y el estudio se convierte en rutinario, hace que la mente y el cuerpo se estresen.
Qué me está pasando
El bloqueo mental es un mecanismo de defensa que aflora cuando una situación nos supera.
Surgen las dudas, el sentimiento de no valer para estudiar la oposición, el miedo al fracaso.
Se produce el conflicto y el modo de solucionarlo es afrontándolo o huyendo.
Al principio es falta de concentración, la incapacidad de organizar los pensamientos o falta la intención de ponerse a estudiar.
Incluso puede llegar a generar problemas más graves de ansiedad y depresión, alteraciones del sueño.
Te resistes a estudiar o rechazas de lleno cualquier cosa que tenga que ver con las oposiciones.
Y es entonces cuando muchos estudiantes deciden dejar las oposiciones o, al menos, darse un tiempo.
De hecho, es muy importante plantearse las oposiciones como algo a largo plazo, para que no ocurra este desgaste demasiado pronto.
Prevenir el bloqueo mental
Aunque todo el mundo a lo largo de su vida puede tener un o varios episodios de bloqueo, este se puede prevenir.
Y lo primero que debes saber es que no estás fracasando ni eres un incompetente.
Cuando ya nos ha ocurrido es más fácil que podamos identificar los primeros síntomas y atajarlo, para que no haya una próxima vez.
La mente y el cuerpo lo que nos están pidiendo es un cambio.
El cambio conlleva parar, plantearse cómo se han estado haciendo las cosas hasta el momento y, la buena noticia, plantearnos actuar para revertir la situación.
¿Cómo?
Descansa
Lo primordial es descansar, alimentarse correctamente, hacer ejercicio, relajación…
Es decir, adoptar un modo de vida saludable que muchas veces se descuida durante la preparación de las oposiciones.
Aprende técnicas de control emocional
Las técnicas de control emocional te servirán para afrontar cualquier aspecto de tu vida, pero serán unas aliadas infalibles para el estudio de tus oposiciones.
Revisa tu forma de actuar en estos últimos meses
¿Tu vida solo se ha limitado al estudio? ¿Has perdido el contacto con tus amigos? ¿Solo te relacionas con personas en tu misma situación? ¿Has descuidado tu salud?
Puede que no nos demos cuenta de que, a veces, son las cosas que no hacemos las que provocan estos bloqueos.
Recompénsate
Un día en el campo, una noche con tus amigos, haz algo que te apetezca mucho hacer.
Puede que la oposición te haya absorbido tanto que te hayas olvidado de que ahí afuera existe el mundo y que había cosas que te gustaba hacer.
¿Te has parado a pensar desde hace cuanto tiempo no escuchas música o lees un libro?
Incluso puedes salir a estudiar al aire libre.
Estudiar unas oposiciones no significa que tengas que estar enclaustrado.
Supera pequeñas metas
No hace falta que te estudies un tema en una semana. Probablemente en dos lo afiances mejor y te estrese menos.
Márcate un objetivo, aunque sea muy pequeño al principio. Lo superarás de sobra, así que celébralo.
Superar las metas que te has marcado te animará a continuar afrontando retos más grandes.
Échale creatividad
La creatividad no está reñida con las oposiciones.
Desde técnicas mnemotécnicas hasta agendas llenas de dibujos y colores.
Date una vuelta por Instagram y seguro que encuentras inspiración.
Lo peor que te puede pasar es que suspendas las oposiciones
Claro, pero si las abandonas, eso lo tienes fijo.
Si te presentas, aunque no apruebes, tendrás la oportunidad de saber cómo puedes mejorar para enfrentarte al próximo examen.
