Estudiar oposiciones conlleva pasar horas y horas leyendo. Pero hoy no hablamos de ese tipo de lectura, sino del placer de leer un libro que te apetece y de todos los beneficios que la lectura te va a aportar y que repercutirán en el estudio de tu oposición.
Al estudiar oposiciones el tiempo libre que se tiene disminuye, pero si lo aprovechas para, entre otras cosas, leer un libro sin que sea una obligación, y haces de ello un hábito, notarás pronto sus efectos positivos.
Como todo, la lectura es un hábito, así que cambia el móvil por un libro. Pero ten cuidado, puede ser incluso más adictivo que el móvil.
Cómo hacer de la lectura un hábito
Habituarse a algo lleva su tiempo, pero cuando te des cuenta que la lectura te saca de la rutina y es un tiempo que te dedicas a ti, te va a costar poco acostumbrarte.
Aprovecha el tiempo
Puede que solo tengas 15 minutos al día antes de dormir, aprovéchalos para leer.
Si te habitúas a leer antes de dormir, seguro que acabarás apagando la tele y sacarás mucho más que 15 minutos al día.
Antes de dormir, fíjate una hora máxima para acabar con la lectura, porque necesitas dormir.
Si no te concentras estudiando en transporte público o mientras esperas, es un momento estupendo para la lectura.
Lee en un entorno agradable
Si estudias la oposición en la biblioteca, puedes aprovechar 15 minutos antes de irte a leer un libro.
Si aprovechas para leer en casa, apaga el ordenador, deja el móvil lejos, ve a un lugar cómodo, relájate y ejercita la mente de manera provechosa y sin darte cuenta.
No pasa nada por dejar un libro sin terminar
Hay veces que los libros nos llaman la atención por el título o porque es “el último” de algún autor muy conocido.
Pero muchas veces la portada y el título son más bonitos que el contenido. No pasa nada, mejor no perder el tiempo con una historia que no estás disfrutando.
Siempre habrá un libro que te guste esperando a ser leído.
Una recomendación al respecto es que no empieces a formarte el hábito de lectura con obras de 2000 páginas o con obras clave de la literatura que sabes que te va a costar, tipo “El Quijote” o “En busca del tiempo perdido”.
Son obras maestras, pero para más adelante y depende del estado de ánimo en el que te encuentres y lo ocupada que tengas la cabeza con trabajo, familia, oposición…
Mejor que leas libros que te diviertan y que te ayuden a desconectar que no que te empapes de “obras maestras densas”, que ya tendrás tiempo cuando saques la plaza.
Los beneficios de la lectura
La lectura nos proporciona innumerables beneficios, pero muchos de ellos van a ayudarte a estudiar tu oposición.
Reduce el estrés
En el año 2009 la Universidad de Sussex (Reino Unido), realizó un estudio que concluyó que leer puede reducir hasta en un 68% el nivel de estrés.
Este porcentaje es mucho mayor que el que proporciona escuchar música o hacer deporte.
En menos de 10 minutos de lectura, el ritmo cardiaco se reduce, así como la tensión muscular acumulada.
Fortalece las conexiones neuronales
Al leer, se forman nuevas conexiones neuronales, por lo que la reserva cognitiva aumenta.
Además, se ponen en juego varias regiones cerebrales.
Dependiendo del tipo de género que estés leyendo, se ponen en marcha diferentes zonas del cerebro.
Lo que es importante es que aunque tú sepas que estés leyendo, el cerebro lo identifica como si fuera verdad.
Dependiendo de lo que leas se activarán unas zonas cerebrales u otras.
Si se describe una receta de cocina, se activarán las áreas del olfato y el gusto.
Por el contrario, si lees una novela de terror, será la zona de la amígdala la que se ponga en marcha.
Y si lo que te gusta es la poesía hay un reconocimiento musical.
Estarás “viviendo y sintiendo” lo que lees basándote en experiencias pasadas.
Por lo tanto, el deterioro cognitivo será más lento. Al estimularse el cerebro y favorecer a la concentración, es más fácil que la degeneración cognitiva se prevenga, ya que ejercitas la memoria y fijas recuerdos.
Favorece la concentración
En el tiempo de la multitarea y de estar mirando el móvil cada dos minutos, leer aumenta la capacidad de concentrarnos en una sola cosa.
Leer implica concentrarnos para descifrar lo que quiere decir el texto y hacer una interpretación de su significado, por lo que requiere toda nuestra atención.
Si además estamos procesando toda esta información a través de una historia que nos gusta, la concentración es aún mayor.
Si quieres saber más sobre cómo mejorar tu concentración, te lo contamos en este post.
Previene el insomnio
Ver la tele, estar jugando con el móvil o ver la tele pendiente de tus redes sociales, o irte a dormir justo después de dejar el ordenador te provocará insomnio.
Ello es debido a la luz azul de las pantallas que impacta en tus biorritmos, haciéndote creer que aún es de día.
Sin embargo si estás leyendo un libro o un ebook (que no desprende luz azul de su pantalla) dormirás más y con mayor calidad de sueño.
Obtendrás mayores habilidades comunicativas
Tu vocabulario se enriquecerá, al igual que tu sintaxis, por lo que serás capaz de hacer un correcto uso del lenguaje en cualquier situación en la que te encuentres.
Un estudio realizado por la Universidad de Oxford relacionó a los lectores que leían por placer con un mayor éxito profesional.
Aumentará tu empatía
Leer implica que puedas ponerte en el lugar de un personaje.
Así serás capaz de entender otros puntos de vista u otras creencias, pensamientos o acciones. Es lo que llamamos empatía.
La persona lectora trasladará esta empatía a su vida cotidiana. Lo cual hará que tenga una mente más abierta a valorar diferentes puntos de vista y a ser una persona con habilidades sociales.
Desarrollarás tu creatividad
Lo primero que haces al leer un libro es imaginarte al personaje, su mundo, su vida.
Por este motivo nos encantan o no nos gustan nada algunas películas basadas en libros.
El mismo personaje es diferente para cada uno de nosotros, así que al imaginar estás creando.
Esperamos haberte convencido de que la lectura es, además de un placer, una herramienta que te aportará múltiples beneficios y te ayudará a mejorar tanto académicamente como personalmente.
¡Felices lecturas!
